A pesar de venir como desfavorecidos en las apuestas previas, los cruzados dieron la sorpresa. Y es que, gracias a gran resistencia, lograron alcanzar una victoria necesaria para sus aspiraciones en el torneo.
A continuación, todos los detalles del emocionante partido.
Onda de goles
Las acciones abrieron rápidamente con un gol tempranero al minuto 7, para los locales. El mismo fue obra del delantero Fernando Matías Zampedri, quien contó con una asistencia de Bryan Andrés Rovira Ferreira. Puedes ver la celebración del gol en el siguiente enlace:
¡QUIÉN MÁS QUE TÚ, TORO! ✊
¡Celebramos con todo el golazo de Fer Zampedri para el 1-0 de #LosCruzados! ⚪🔵 pic.twitter.com/EjwrbP1ZUf
— Universidad Católica (@Cruzados) August 26, 2023
Luego, en el minuto 53, Jorge Eduardo Ortiz Torres, que entró como sustituto, añadió un segundo gol para la Universidad Católica, con la asistencia de Zampedri.
Sin embargo, Ñublense luchó hasta el final del partido y consiguió un gol al minuto 107, gracias a Branco Antonio Provoste Ovalle. Pero fue insuficiente para revertir la situación.
Duelo duro y cambiante
El juego estuvo lleno de tensión y dureza, lo que resultó en tarjetas rojas para ambos equipos. Gary Kagelmacher, de los cruzados, y Raimundo Rebolledo Valenzuela, del Ñublense, fueron expulsados en los minutos 30 y 35, respectivamente.
Además, se presentaron ocho tarjetas amarillas, cuatro para cada equipo. El partido también vio numerosos cambios en la alineación por parte de los dos clubes.
Una noche de sorpresas
Teniendo en cuenta las estadísticas del partido, Ñublense dominó la posesión del balón con un 57%, frente al 43% de Universidad Católica. A pesar de tener menos posesión, la ‘UC’ logró marcar más goles, en una noche en la que la eficacia resultó ser la clave.
Con este resultado, los cruzados se colocan en la novena posición en la tabla, con 30 puntos. Mientras que Ñublense queda en decimotercera posición con 24 puntos.
La victoria de ‘UC’ contra Ñublense es ciertamente un recordatorio de que en el fútbol las predicciones no siempre se cumplen. Así que, a veces, hay que esperar lo inesperado.